Los proyectos de ACS con impacto positivo ambiental y social que van más allá de las finanzas
ACS está alineada con los ODS de la ONU y los retos climáticos que exige el planeta contemplados en el Green Deal de Bruselas. Prueba de ello, la compañía española ha sido incluida de nuevo en uno de los índices íntimamente relacionados con la sostenibilidad a nivel internacional, el Dow Jones Sustainability Index (DJSI), tanto en el índice global (DJSI World) como en el europeo (DJSI Europe). También sus filiales HOCHTIEF y CIMIC están incluidas en el DJSI. Concretamente, la primera de ellas en el DJSI World y la segunda ha sido incluida en el DJSI Australia.
El hecho de estar presente en estos índices, que es uno de los principales referentes mundiales en materia de gobierno y sostenibilidad, supone un reconocimiento muy importante a las empresas líderes, según criterios de desempeño económico, ambiental y social utilizando una metodología de evaluación y criterios de gran exigencia.
Por ello, y en esta línea, la inclusión de ACS en estos índices de DJSI representa, entre otros aspectos, el reconocimiento del compromiso y esfuerzo continuo realizado por todas las empresas del grupo empresarial español en términos de sostenibilidad y generación de valor compartido para toda la sociedad.
Se trata, en definitiva, de una forma de desarrollar negocios y llevar adelante proyectos empresariales que estén comprometidos, no sólo con sus accionistas, instituciones o con los diferentes stakeholders, sino también con el planeta y con la sociedad en su conjunto suprimiendo de manera progresiva cualquier huella de carbono.
Compromiso que va más allá de la vertiente financiera
Una manera de desarrollo que crea valor en la sociedad y que es cada día más valorado por los rankings internacionales, los inversores, los accionistas y las personas porque, sin duda, vivimos tiempos en los que no sólo la vertiente financiera es la única a tener en cuenta, sino que el interés se centra en tres ejes: el impacto ambiental de la actividad de las compañías, la acción social, así como la gobernanza en materia de integridad y cumplimiento normativo.
Algunas de estas pautas, que están dentro de la estrategia de ACS, una de las compañías más fuertes del mundo, tanto por cartera de negocios como por su alta diversificación, y así lo ratificó el presidente Florentino Pérez en la Junta General de Accionistas celebrada la semana pasada. Explicó en esta cita con los accionistas que durante el 2020, año complicado marcado por la pandemia del Covid-19, que se han hecho varios progresos y compromisos en política de sostenibilidad e implicación con los grupos de interés.
Por un lado, destacó el presidente que el pasado año 2020, ACS ha conseguido disminuir las emisiones totales, tanto directas como indirectas, en casi un 20%, reafirmando nuestros objetivos globales en la eficiencia energética y lucha contra el cambio climático», detallaba.
La estación verde de alta velocidad en Birmingham (Reino Unido)
En esta línea, cabe destacar la última adjudicación que ACS, en consorcio con la empresa británica MACE, ha conseguido en Birmingham (Reino Unido) para construir una nueva estación de alta velocidad por valor de 660 millones de euros. Un espacio que, una vez comience a operar, no emitirá ninguna emisión contaminante.
Se trata, en concreto, de un nuevo proyecto que conectará Londres con Manchester y Leeds, con un presupuesto global de 125.000 millones de euros. Tendrá una extensión de más de 2.800 metros cuadrados de paneles solares instalados sobre las marquesinas de los andenes e incluirá, además, una novedosa tecnología para capturar el agua de lluvia y tendrá diseño ecológico.
Ha elevado casi un 54% el gasto medio en materia de seguridad laboral
Por el otro, subrayaba, además, que en el área social han reforzado sus políticas de seguridad y salud en el trabajo, cuyos planes de formación y prevención son críticos en la actividad de ACS. Por ello, durante 2020 la compañía cotizada ha elevado un 53,8% el gasto medio por empleado en materia de seguridad y salud laboral, hasta alcanzar los 1.197 euros. Esto se ha visto reflejado en la reducción de los índices de siniestralidad en todas las áreas de actividad.
ACS, también explicó en la misma intervención, ha profundizado en la política de diversidad de género, incentivando la incorporación de la mujer a diversos puestos y funciones. En cifras, en este momento, la plantilla femenina supera el 40% del total de empleados. Pero, además, según datos de la compañía, un total de 10.050 personas pertenecen a colectivos vulnerables, es decir el 5,6% de sus empleados.
Concretamente, son trabajadores procedentes de colectivos desfavorecidos, como personas con discapacidad, personas en riesgo de exclusión social, víctimas de violencia de género, víctimas de terrorismo e, incluso, desempleados de larga duración.
Objetivos de sostenibilidad 2020 alcanzados y nueva ruta
En materia de sostenibilidad, concluía el presidente de ACS, la compañía ha alcanzado la mayoría de los objetivos que puso sobre la mesa con el Plan 20:20 impulsado hace ya cinco años. Por ello, ahora, destacaba Pérez en su intervención dedicada a los accionistas, ahora hay una nueva ruta sobre la que caminar y que, poco a poco, y con un alto compromiso, que construirá nuevos hitos de lucha contra el Cambio Climático.
Además, también durante el año 2020 las distintas empresas del Grupo ACS y sus empleados han demostrado su compromiso con la sociedad contribuyendo de forma desinteresada y altruista con actividades para frenar los daños de esta crisis sanitaria sin precedentes.
Varias compañías del Grupo ACS repartidas por todo el mundo promovieron entre sus empleados campañas de donación conjunta para colaborar en distintas acciones caritativas, como ayuda escolar, entrega de alimentos o apoyo a desfavorecidos.
No obstante, de todas las filiales de ACS, hay una que por su entrega y ADN social destaca de forma especial Clece. Ésta ha dedicado muchos recursos e inversión a los servicios de asistencia sanitaria, servicios esenciales que se han seguido prestando a lo largo de la pandemia y con las máximas medidas de seguridad y prevención sanitaria en 183 hospitales, además de cuatro hospitales de campaña en España.
Y no sólo eso, además, se reforzaron de manera férrea los servicios de limpieza de hospitales, dependencias policiales y otras infraestructuras y, para ello, se hicieron inversiones en tecnologías más eficientes con el fin último de garantizar espacios seguros tanto para los usuarios como para los empleados.